Una breve crisis y un Blogger´s Day. Y muchos por qué.

A veces para continuar el camino me hace falta volver al principio. Pensarme de nuevo, recolocarme. Ajustar mi propio GPS para comprobar que la inercia no me lleva a donde no quería ir.


Llevo una temporada cuestionándome por ejemplo el sentido de este blog. ¿Qué hago escribiendo sobre mí?¿Le interesa a alguien?¿Qué puedo aportar yo a un mundo virtual totalmente inundado de blogs de todo tipo y toda temática? Una pompa de jabón en el espacio, así de insignificante y dicho sea de paso, vulnerable, me suelo sentir cuando me asomo a esta ventana.

Y mira por donde, casualidad o causalidad de la vida, se cruza en mi camino el Blogger´s Day de Madresfera, y a pesar de llegar de refilón y no poder disfrutar de las ponencias de la mañana, sí llego a tiempo de escuchar justo lo que necesitaba escuchar. Frases y flashes para reflexionar:


Melisa Tuya, escritora y periodista en 20minutos, habló de la necesidad de ser auténtico, sincero y no usar artificios. Sencillamente me conquistó. Sin necesidad de ningún tipo de apoyo visual, solo ella, su mensaje claro, directo y mucho feeling. Del bueno.

Clara Avila. Pensar en SEO te hace artificial. Ser fresco y natural da beneficios a largo plazo. O lo que yo interpreto, si naturalidad y frescura es lo que te sale, no hace falta buscar nada más. El éxito se cuece por dentro cuando te sientes bien y te eres fiel.

Y por si fuera poco, cuando todavía estaba de camino al evento y enchufada a las redes sociales desde el tren intentando seguir lo más relevante, me llegó esta imagen:

Más allá de ser recomendaciones para conseguir éxito con un blog, para mí no deja de ser un semi decálogo del sentido común.Y el foco que señala ni más ni menos que lo que estaba a la vista y me empeñaba en no ver: escribo un blog porque para mí tiene sentido.

Porque mi blog es mi casa, y los dos son para vivirlos.

Porque me sé vulnerable y escribir lo siento como una dificultad, y me siento reforzada cada vez que consigo expresarme con algo de acierto.

Porque hablar de los problemas dándoles un buen pisotón también me hace más fuerte. 

Porque descubro que desde la naturalidad y sin artificios no hay ñoñería, y nos podemos permitir emocionarnos. 

Porque contar parte de mi historia conlleva intimidad, pero eso me hace sentir humana y accesible, y más en contacto con más gente. 

Porque descubro que salir de mi zona de confort y romperme un poco la cabeza siempre me sale a cuenta. 

Y como resumió mi querida Divi, de   Mis hallazgos cuando tienes un hobby pierdes un poco la cabeza y te dejas llevar, porque disfrutas. Ha dicho.